Humanidad. Gente. Personas. Individuos. Bebés.
Gente falsa, hipócrita. Gente malvada, sin corazón. Gente que cada sonrisa que lanza a tu rostro, se clava como un puñal en tu espalda. Gente cobarde que no se atreven a ser sinceros para poder seguir criticando al resto a sus espaldas. Gente que tira indirectas con esas sonrisas tan amplias, tan blancas, tan brillantes, que tan solo puedes mirar para otro lado y seguir tragando todo lo que te digan. O puedes seguirles el rollo y estallar, como ellas pretenden que hagas. Gente que se propone ser mejor que tú y lo consigue, de una manera sucia y rastrera, pero lo consigue. A mí me gusta más ir de frente, con la cabeza en alto y observando cada movimiento de esa gente sin escrúpulos para poder contraatacar o hacerme más fuerte. La primera opción ronda muchas veces mi cabeza. Deseo machacar a ciertas personas falsas, hipócritas y envidiosas, pero mi naturaleza no es así. Prefiero guardar todo dentro de mi cabeza para luego hacerme más fuerte y actuar con inteligencia.
Gente que solo quiere llamar la atención porque necesitan estar atendidas por alguien, y les da igual que el mundo se esté viniendo abajo. Lo importante es el YO, YO y por último YO. No piensan en que es muy probable que estén fastidiándole la vida a otra persona. Sólo piensan en su felicidad y en joderte a ti la vida.
ESTO SE ACABÓ.